En la calma te beso y empezamos un viaje nuevo lleno de uvas de miel y limón.
Como la vida palpitando en los pétalos inherentes de esta primavera soñada, que se abre ante nosotros.
Recorremos el tiempo haciéndolo nuestro aliado, impregnando las circunstancias de los matices de nuestros jeroglíficos, aprendiendo siempre amor.
El universo se estampa en un banquete ante los ojos capaces de ver más allá.
Nos regalamos semillas latentes e inexploradas que quieren ver la luz del sol.
Primavera auténtica llegas tan bella y zalamera que has vencido a la prisa, por eso tú pasión.