Se ha abierto una grieta, un respiradero y entra por el tanta luz que la hormiguita quiere ver que existe y avanza hacia allí con curiosidad y atención. Su pequeña cabeza se cuela y ve el país de Jauja, todo lo que siempre deseaba cae de los árboles o lo descubre allí sucediendo en su momento, en su perfecto instante y quiere con ganas locas formar parte, así que retuerce su cuerpo y entra al cuento. Ella por primera vez se siente poderosa, en el sentido de este bello descubrimiento que la acontece.

Ve un rio que pone “ miedos inútiles “ y se baña en el. Al salir que ligereza embarga su cuerpo, la hormiguita es una bella mariposa que se posa en la rama de un árbol en el que lee “ deseos por cumplir “ y abre sus ojos enormemente porque cuelgan letras que en su cabeza recomponen el puzzle de lo que siente y que ahora se da cuenta que quiere. Hay tantas “AES “ “EMES” “OES y “ERRES” que lo ve claro. Amor, amor y más AMOR. Toda la fauna grita su nombre a la pequeña hormiga, ahora mariposa, el tiempo se ha parado puede ocurrir lo que iba a ocurrir, pero en este país de Jauja, la perspectiva es distinta, le da la vuelta y la mariposa preciosa se “ vuelve arriba” de “abajo a arriba” y de “ fuera a adentro”. Vuela hacía la gran cascada de fresca y viva agua, sin miedo y con amor. Te quiero hormiguita, convertida en mariposa valiente, porque los bastiones caen y tu vuelo crece como la vida en tu interior por saber mirar a través de grietas, en las que siempre, siempre hay LUZ.