Estrella encendida, luz en la noche, resplandeciente luciérnaga y el inmenso cielo apagado te hace brillar.
Sencillez, luminosidad, quietud, punto cero.
Deseas ¿que?… Acércate a ella, titilar con el pulso del bombeo del corazón, manifestarte como ella, quieta y estar.
Incógnitamente, regocijada, solo estando, respirando, amando hasta que sale el brillo, la luz, el sol, el día.
Estrella en la noche, sombra del día, reflujo incesante del universo que despierta y duerme, para descansar y volver a nacer y volar.
Narra el cuento que la estrella con su luz derrotó a la noche, que atónita veía que no podía apagarla.
