Montaña del corazón que palpitas intensa como solo es la vida, cuando se siente y abraza.
Candelas encendidas en la noche, que despiertan esperanzas transformando la oscuridad en la inmensa luz que crece y crece sin parar.
En este ahora tu vida se balancea acunándola en un despertar de regocijo inexplicable, haciendo ver lo invisible.
Caen cadenas que se funden a tus pies, capaces de andar por lo inexplorado, reconciliando dudas que ahora certeramente estallan en el corazón.
Palpitas y respiras.
Creces y amas.