En la espuma de las olas se recrean tus sueños y te ves invencible.
Refulgen en tu interior, nítidos, punteando como talismanes.
Te reconoces, elevándote con ellos, empujado por esas olas, mar adentro y mar afuera, meciéndote hacia el equilibrio.
Flotas sin más y el agua envuelve tu verdad llena de sal y cantan las caracolas, esa canción de paz.
La arena movida por las olas conecta tus sincronías, enlazando tus puentes caídos en un pasado que quedó atrás.
Y el sol brilla en ti, como un titán.