Olas cayendo, rompiendo los marcos de tus pensamientos, que se zambullen en la mar de tus anhelos.
Zozobran los augurios negros y la sal blanca te eleva al cielo.
Allí danzas y vuelas, las nubes te miran con deseo.
Llegaste al cielo cuando creíste en los sueños que te acarician con amor intenso, que te abrazan sin ahogar tu aliento.
Ahora quieres contarle al mundo entero que estás en el cielo, cuando vibras al respirar por lo bien hecho.