Bello impulso que late inconsciente desde milenios y sale a la luz.
Que impregna de amor los rincones más escondidos, llegando como olas, invadiendo las zonas más áridas.
Crecen campos de amapolas que despiertan a los ojos dormidos con su efímera belleza y la luz entre las espigas hace soñar.
Increíble vida, el cielo alinea los astros, envolviendo en su afán la verdad, que es tan libre que danza a tu alrededor.
Y cae una lluvia intensa, que todo lo limpia para crecer hacia el interior del bosque, de la montaña, donde eres solo tú.