Pálpitos en el bosque, caen las hojas viejas y a partir de ellas, una nueva vida comienza.
Los nudos de los árboles se desenredan y tan largos llegan a las estrellas, que los besan.
El lobo escondido, lo ve y corre por la ladera, para llegar a lo alto y unirse a esta fiesta, tan natural y bella.
Sopla el viento para refrescar la escena y contar los secretos que vuelan.
La noche sonríe, zalamera, esperando que el amanecer desborde su alma entera.