Ignoras tantas cosas pero escuchas el latido unas veces más fuerte y otro más lejano de esa fuente que te habita y y que resucita en ti siempre y hay que contarlo, hay que sacar de bandera siempre a la esperanza, ese verde campo que lo pinta todo de belleza.
Como no respirar y escuchar lo verdadero, tu más íntima esencia que es la que te eleva por encima de cualquier obstáculo y al igual que los atletas más fieros y abnegados puedes elevarte y hasta volar tan alto que los pájaros cantan a tu lado. Gracias por respirar profundamente y ver.









