Inmensa alegría, gozo en el alma, luz de luces, amor de amores, nacimiento De Dios.
Llegas sonriendo, naciendo de nuevo y la esperanza vuela con cientos de mariposas alrededor. Desaparece el desamparo, la crítica hipócrita, la metálica envidia, el egoico egoísmo. Nace el amor en todas las hierbas y granos de arena, bosques, prados, criaturas al respirar un amor sin palabras, eterno en el tiempo y que siempre ha estado, está y estará y llega el descanso, el reposo y la oración. Gracias cielo, gracias tierra, Jesús en tú corazón. ¡Feliz Navidad!









