Imprescindibles los ojos que miran embelesados a la vida que corre.
Esa gota de rocío que pende de una hoja cayendo a la tierra, sólo vista por ellos.
Su brillo enajena y hace crecer hierba en las mas secanas y estériles tierras.
Virtuosos por ver luz en los mas oscuros pozos.
Si ellos te miran encenderán, ese fósforo que prende en ti, liberándote.
Por creer en ti, ellos lloran y bañan de alegría tu playa.