Érase una vez y otra vez y otra un renacer de vida, de espacio para dar a luz la paz del alma esa que se siente en el bosque con ese silencio expectante de ahora sin análisis sólo siendo, solo germinando desde el paraíso al paraíso de la abundancia de la vida vivida con amor, con paz, con alegría ¿como explicar la sonrisa de un niño? De ese niño que está en ti “interior” que sabe, que no siente miedo y anda despreocupado, un gusto conocerle y sacarle a paseo para ser el vuelo, el rayo de luz, la flor silvestre, el fuego del corazón, el don especial. Para escucha el silencio y crece, niño de mi corazón.

Sabes que el viento con olor a campo y lavanda enciende tu rescoldo ese del que salen chispas que alumbran la oscuridad. Se transforma la vieja herrumbre en una nueva esperanza, en un renacer histórico que no para de crecer. Lluvia tenue que impregna el campo de tan bellos olores que te hacen volar como los pájaros a ese lugar sagrado que está dentro de ti, donde la luz te invade.

Cantan los pajaritos cada uno con su trinar especial, como nosotros cada día al despertar.

Que tus labores sean resplandecer, cantar y cumplir con tu don especial. No te puedes quedar con tu esencia, la tienes que saborear, dar y explotar todos los días. Así podrás al final de tus días, sonreír de verdad, bailar de felicidad y en el silencio encontrar todas las semillas que quieres mostrar.Rey, reina sé y haz volar tus sueños como cometas en el mar.

Las olas suben y bajan, el corazón se acompasa con ellas es el fluir de la vida ese diapasón que afina que se deleita en el momento que descubre razones nuevas para tener esperanza. Sí esa bandera que ondea jubilosa cuando sonríes con esas mezclas de verdades que antes ni conocías y que te trae la marea, si quieres las coges y sino las dejas.

Cógelas si sonríes bueno es, así cuando la ola te baje tu impulso será mayor al subir respirarás mejor, profundo, hondo y pacíficamente.

Árboles tupidos de yemas en flor que prodigiosamente nacen de tallos que van del gris al marrón, del plateado al color tierra, maravillan a los ojos en su esplendor.

Esa fuerza natural que nace y vibra contigo te recuerda tu despertar a la vida, a los sueños, al milagro que eres, por ello créetelo, date a la verdadera esencia y no te quedes en circunloquios que no llevan a ninguna parte.

Inspírate de tu poder, dando las flores que tienes. Tú eres la primavera, siente renacer esos nudos de flor en ti.

¡Que bello despertar, que entusiasmo, que paz! Manjar de abejas, miel en tus venas y esa  es la dulce verdad.

¿Por ser lo que más quieres, que darías?  No debería ser difícil, al ser lo que más quieres, a no ser que eso que quieres estuviera vacío, fuera banal y no aportara nada a los demás.

Si te desnudas de triquiñuelas, de accesorios ralos, de dependencias estancas, eso es lo que quieres. Ser en mayúsculas la máxima expresión de vida vibrante que aporta y no destruye, que emana esa paz que sienten los pájaros al volar, concentrados en ser el viento aun siendo materia. Todos somos uno ¿cómo explicarlo? Unir, siempre unir, deshacer nudos de estómago, comprender misterios que albergan la esperanza de ser mejores. Uno con todos, todos con todos y el miedo se aplana. Torrente de misericordia inúndanos, sálvanos, despierta en nosotros la amabilidad y más allá llévanos a amar, a engrandecer este lugar.

 Paz, cuando tu mano se da sin esperar, que nazca en nosotros ese caudal, que responsable verdad, hacer lo que más quieres, que es dar. Gracias esperando estoy.

Vida amada, teñida de tantos colores, propaga la calma del corazón y la cabeza fresca, que el ahora como un ancho mar en el que todos bogamos a una sea y quítanos la prisa de la ciudad. 

Saborea la vida, no la dejes pasar sin más, rubrica en ella el silencioso despertar de la hierba verde campo, verde esperanza entre el gris del asfalto y aunque aún no ves la flor en nada nacerá sino para de llover, de llorar, un dos, tres y ahí está, amarilla, alegre y el primero que la vio ese es alumno aventajado.

Tantos colores, tantos sabores, que en armonia deben vivir. Vida únelos no los separes, si la vida es en mayúsculas que así sea.

Detrás del cielo gris , un azul intenso tanto como la lluvia que hoy cae, agua que todo lo limpia y que cubre la sed de todo y todos.

Limpieza del alma, del ser, amados todos los rincones, ninguno queda libre, toda la dureza y sequedad ablandada por el agua de la vida.

Fuente que habita dentro y ahora te moja para despertar, toca tus sienes y ves más allá.

Fuente, divinidad, amor, paz, entre el gris y el azul el equilibrio, la autorrealización entre las huellas de barro, la grandeza del caminar.

Anda, ven que nos esperan, con la alegría del canto del pájaro ese que escuchas oyendo la lluvia caer.

Un nuevo comienzo, una libertad saboreada, al principio parecía amarga, pero ahora es tan dulce como un beso enamorado lento y sin prisas, sin más que hacer que estar callado y subliminalmente atento y extasiado.

Crecen rosas de colores en el corazón que se riegan con la lluvia de cada día porque entre la rutina y el día ocurre la vida, palabra inmensa donde crece todo. 

Dame la mano que no es tarde que vivimos para encontrarnos y te conoceré no donde tontamente pensé como una princesa, sino donde está marcado, ahí en ese árbol que da sombra a un banco.

Rosas silvestres rodean al banco de color rosado claro, premonición bella concedida, más tarde, más temprano, así es la vida por favor no te la pierdas.

Bella intención sal al exterior, crece y multiplícate al tocar a unos y otros haciendo un mundo mejor. Naciste de la atención en un buen corazón, sigue la estela amorosa por este mundo de un rincón a otro provocando sonrisas de amor desconcertadas al llegar en un momento difícil,  donde caía la esperanza herida y ahora sin embargo crece en un campo verde lleno de amapolas al sol. Si bella intención gracias por llegar, suceder en hecho y así traspasar la frontera de pensamiento a acción, de humo a realidad hoy y esa obra abrirá las puertas de tantos ríos de amor….