Sabes que el viento con olor a campo y lavanda enciende tu rescoldo ese del que salen chispas que alumbran la oscuridad. Se transforma la vieja herrumbre en una nueva esperanza, en un renacer histórico que no para de crecer. Lluvia tenue que impregna el campo de tan bellos olores que te hacen volar como los pájaros a ese lugar sagrado que está dentro de ti, donde la luz te invade.

Cantan los pajaritos cada uno con su trinar especial, como nosotros cada día al despertar.

Que tus labores sean resplandecer, cantar y cumplir con tu don especial. No te puedes quedar con tu esencia, la tienes que saborear, dar y explotar todos los días. Así podrás al final de tus días, sonreír de verdad, bailar de felicidad y en el silencio encontrar todas las semillas que quieres mostrar.Rey, reina sé y haz volar tus sueños como cometas en el mar.